Raquetas de nieve en la Sierra de Liena

El valle del río Real y la Sierra de Liena son uno de esos lugares donde la nieve suele estar garantizada

Los años que la nieve nos bendice con su visita la vida es mucho más sencilla para el guía de montaña.

Los paseos por el bosque nevado son el mayor de los placeres que uno puede experimentar en los Pirineos.

En los últimos años y como consecuencia del cambio climático cada vez nos vemos obligados a buscar la nieve en cotas más altas.

El valle del rio Real y la Sierra de Liena son uno de esos lugares donde la nieve suele estar garantizada.

Una pista solo apta para vehículos 4×4 nos permitirá ganar altura y llegar al manto blanco.

Dependiendo de las condiciones tal vez sea necesario “portear” (en el argot caminar con las raquetas colgada de la mochila ) hasta el punto donde realmente sean imprescindibles.

A partir se ese punto las cimas de las montañas se despliegan bajo nosotros.

La cara norte de Monte Perdido, Puntas Verdes, el collado de Añisclo nos miran cara a cara.

Es el reino del Águila real (Aquila chrysaetos), el Sarrio o Rebeco ( Rupicapra rupicapra) y de las sonoras y estridentes Chovas piquigualdas (Pyrrhocorax graculus).

Este es un terreno de juego solitario, poco transitado y que exige una cierta forma física para disfrutarlo pero que por contra, nos ofrecerá unas vistas inolvidables de las montañas.